lunes, 17 de mayo de 2010

Via Crucis claustral en el día de San José

En esta ocasión, y coincidiendo con el quinto Viernes cuaresmal, se prodeció al rezo del ejercicio del Santo Via Crucis por el interior de las naves del templo franciscano concluida la misa en honor a San José, cotitular de esta cofradía y previo a la imposición de los escapularios con el que cada año se reciben a los nuevos hermanos.

Dicho acto estuvo caracterizado por la sobriedad y el recogimiento que exige una devoción tan propia de este tiempo como lo es la cuaresma. Y si cabe, dicho sentimiento se acentuó todavía más con el apagado de la iluminación principal de la parroquia resaltando el crucifijo con el que se iban realizando las distintas estaciones, flanqueado a su vez por cirios que la junta de gobierno de esta cofradía iban sosteniendo para proporcionarle un poco de visibilidad.


El modelo de oración de Via Vrucis elegido para tal acto fue el modelo de la tercera semana compuesto por la Madre Teresa de Calcuta para los jóvenes del mundo, con motivo del Congreso Eucarístico Internacional de 1976, con el título: "Un recorrido por la Pasión de Cristo, de ayer y de hoy", muy en sintonía con el espíritu franciscano.

Y entre cánticos penitenciales como "Perdona tu pueblo, Señor" o "A ti levanto mis ojos", se procedió a realizarse como es propio, las distintas estaciones, introduciendo la siguiente oración:


Señor, ayúdanos para que aprendamos a aguantar las penas y las fatigas,
las torturas de la vida diaria.

Que tu muerte y ascensión nos levante,para que lleguemos a una más grande y creativa abundancia de vida.

Tú que has tomado con paciencia y humildad la profundidad de la vida humana,
igual que las penas y sufrimientos de tu cruz,
ayúdanos para que aceptemos el dolor y las dificultades que nos trae cada nuevo día,
y que crezcamos como personas, y lleguemos a ser más semejantes a Ti.

Haznos capaces de permanecer con paciencia y ánimo,
y fortalece nuestra confianza en tu ayuda.

Déjanos comprender que sólo podemos alcanzar una vida plena
si morimos poco a poco a nosotros mismos y a nuestros deseos egoístas .

Pues solo si morimos contigo, podemos resucitar contigo.

Amén.

Tras esta oración inicial, se dio paso a contemplar la primera estación. Y entre una estación y otra se podía escuchar jaculatorias en honor a Jesús, la Virgen y San José, además del clásico "te adoramos Cristo y te bendicimos."

Jesús, José y María, os doy el corazón y el alma mía.Jesús, José y María, asistidme en mi última agonía.
Jesús, José y María, con vosotros descanse en paz el alma mía.

Señor, pequé. Tened piedad y misericordia de mí. Bendita y alabada sea la pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo y los dolores de su afligida Madre. Amén

ESTACIÓN I: Jesús es condenado a muerte.

"Llegada la mañana, todos los príncipes de los sacerdotes, los ancianos del pueblo, tuvieron consejo contra Jesús para matarlo, y atado lo llevaron al procurador Pilatos." (Mateo 27/1-2)

El pequeño niño que tiene hambre, que se come su pan pedacito a pedacito porque teme que se termine demasiado pronto y tenga otra vez hambre. Esta es la primera estación del calvario.

ESTACIÓN II: Jesús carga con la cruz.

"Entonces se lo entregó para que lo crucificasen. To
maron, pués, a Jesús, que llevando la cruz, salió al sitio llamado Calvario, que en hebreo se dice Gólgota" (Juan 19/16-17)

¿No tengo razón? !Muchas veces miramos pero no vemos nada! Todos nosotros tenemos que llevar la cruz y tenemos que seguir a Cristo al Calvario, si queremos reencontrarnos con Él. Yo creo que Jesucristo, antes de su muerte, nos ha dado su Cuerpo y su Sangre para que nosotros podamos vivir y tengamos bastante ánimo para llevar la cruz y seguirle, paso a paso.

ESTACIÓN III: Jesús cae por primera vez.

"Dijo Jesús: El que quiera venir en pos de mí, qu
e se niegue a sí mismo, tome su cruz y sígame, pues el que quiera salvar su vida la perderá: pero el que pierda su vida, ese la salvará" (Mateo 16/24)

En nuestras estaciones del Via Crucis vemos que caen los pobres y los que tienen hambre, como se ha caído Cristo. ¿Estamos presentes para ayudarle a Él? ¿Lo estamos con nuestro sacrificio, nuestro verdadero pan? Hay miles y miles de personas que morirían por un bocadito de amor, por un pequeño bocadito de aprecio. Esta es una estación del Via Crucis donde Jesús se cae de hambre.
ESTACIÓN IV: Jesús se encuentra con su Madre.

"Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra
mi espíritu en Dios mi salvador, porque ha mirado la humillación de su esclava... desde ahora me felicitarán todas las naciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí" (Lucas 1/45-49)

Nosotros conocemos la cuarta estación del Via Crucis en la que Jesús encuentra a su Madre. ¿Somos nosotros los que sufrimos las penas de una madre? ¿Una madre llena de amor y comprensión? ¿Estamos aquí para comprender a nuestra juventud si se cae? ¿Si está sola? ¿Si no se siente deseada? ¿Estamos entonces presentes?

ESTACIÓN V: El cirineo ayuda a Jesús a cargar la cruz.

"Cuando le llevaban a crucificar, echaron mano de un tal Simón de Cirene, que venía del campo y le obligaron a ayudarle a llevar la cruz" (Lucas 23/26)

Simón de Cirene tomaba la cruz y seguía a Jesús, le ayudaba a llevar su cruz. Con lo que habéis dado durante el año, como signo de amor a la juventud, los miles y millones de cosas, que habéis hecho a Cristo en los pobres, habéis sido Simón de Cirene en cada uno de vuestros hechos.

ESTACIÓN VI: La verónica limpia el rostro de Jesús.

"Porque tuve hambre y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber" (Mateo 25/35)

¿Con respecto a los pobres, abandonados, los no deseados, somos como la Verónica? ¿Estamos presentes para quitar sus preocupaciones y compartir sus penas? ¿O somos parte de los orgullosos que pasan y no pueden ver?

ESTACIÓN VII: Jesús cae por segunda vez.

"¿Quiénes son mi madre y mis parientes? Y extendiendo su mano sobre sus discípulos dijo Jesús: He aquí a mi madre y mis parientes... quienquiera que haga la voluntad de mi Padre" (Mateo 12/48-50)

Jesús cae de nuevo. ¿Hemos recogido a personas de la calle que han vivido como animales y se murieron entonces como ángeles? ¿Estamos presentes para levantarnos? También en vuestro país podéis ver a gente el parque que están solos, no deseados, no cuidados, sentados, miserables. Nosotros los rechazamos con la palabra "alcoholizamos". No nos importan. Pero en Jesús quien necesita nuestras manos para limpiar sus caras. ¿Podéis hacerlo? ¿O pasaréis sin mirar?

ESTACIÓN VIII: Jesús consuela a las mujeres.

"Le seguía una gran multitud del pueblo y de mujer
es, que se lamentaban y lloraban por Él. Vuelto hacia ellas les dijo: Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí, llorad más bien por vosotras mismas y por vuestros hijos" (Lucas 23/27-28)

Padre Santo, yo rezo por ellas para que se consagren a tu santo nombre, santificadas por Ti; para que se entreguen a tu servicio, se te entreguen en el sacrificio. Para eso me consagro yo también y me entrego como sacrificio con Cristo.

ESTACIÓN IX: Jesús cae por tercera vez.

"Os he dicho esto para que tengais paz conmigo. En el mundo tendréis tribulaciones, pero confiad: yo he vencido al mundo" (Juan 16/33)

Jesús cae de nuevo para ti y para mí. Se le quitan sus vestidos, hoy se le roba a los pequeños el amor antes del nacimiento. Ellos tienen que morir antes del nacimiento. Ellos tienen que morir porque nosotros no deseamos a estos niños. Estos niños deben quedarse desnudos, porque nosotros no deseamos, y Jesús toma este grave sufrimiento. El no nacido toma este sufrimiento porque no tiene más remedio de desearle, de amarle, de quedarme con mi hermano, con mi hermana.

ESTACIÓN X: Jesús es despojado de sus vestiduras.

"Cuando los soldados crucificaron a Jesús, tomaron sus vestidos, haciendo cuatro partes, una para cada soldado y la túnica" (Juan 19/23)

!Señor, ayúdanos para que aprendamos a aguantar las penas, fatigas y torturas de la vida diaria, para que logremos siempre una más grande y creativa abundancia de vida.!

ESTACIÓN XI: Jesús es clavado en la cruz.

"Después de probar el vinagre, Jesús dijo: Todo está cumplido, e inclinando la cabeza entregó el espíritu" (Juan 19/30)

!Empecemos la estaciones de nuestro via crucis personal con ánimo y con gran alegría, pues tenemos a Jesús en la sagrada Comunión, que es el Pan de vida que nos da vida y fuerza! Su sufrimiento es nuestra energía, nuestra alegría, nuestra pureza. Sin Él no podemos hacer nada.

ESTACIÓN XII: Jesús muere en la cruz.

"Después de probar el vinagre, Jesús dijo: Todo está
cumplido, e inclinando la cabeza entregó el espíritu" (Juan 19/30)

!Empecemos la estaciones de nuestro via crucis personal con ánimo y con gran alegría, pues tenemos a Jesús en la sagrada Comunión, que es el Pan de vida que nos da vida y fuerza! Su sufrimiento es nuestra energía, nuestra alegría, nuestra pureza. Sin Él no podemos hacer nada.

ESTACIÓN XIII: Jesús es bajado de la cruz.

"Al caer la tarde vino un hombre rico de Arimatea, llamado José, que era discípulo de Jesús... tomó su Cuerpo y lo envolvió en una sábana limpia" (Mateo 27/57-59)

Vosotros jóvenes, llenos de amor y de alegría, !No desperdiciéis vuestras fuerzas en cosas sin sentido!

ESTACIÓN XIV: Jesús es sepultado.

"Había un huerto cerca del sitio dónde fue crucificado Jesús, y en él un sepulcro nuevo, en el cual aún nadie había sido enterrado... y pusieron allí a Jesús" (Juan 19/41-42)

Mirad a vuestro alrededor y ved, mirad a vuestros hermanos y hermanas no sólo en vuestro país, sino en todas las partes donde hay personas con hambre que os esperan. Desnudos que no tienen patria. !Todos os miran! !No le volvais las espaldas, pues ellos son el mismos Cristo!

He aquí un vídeo inicial de la celebración.

No hay comentarios:

Publicar un comentario